Buenos días, llegamos por fin al último día de este mes y toca reto #Asaltablogs.
Hemos asaltado a "Cocinando para mis cachorritos". En esta ocasión ha sido Dani quien ha elegido receta y la ha cocinado. Yo me encargo de hacer las fotos y de escribir la entrada. Eso sí, hemos mirado las recetas juntos y al final hemos llegado a un consenso, porque a los dos nos ha parecido genial quedarnos finalmente con este postre, de entre todas las recetas que hemos visto. Algunas se quedan guardadas para probarlas en otra ocasión, porque era muy difícil quedarse solo con una ya que su recetario está lleno de cosas ricas.
Como he dicho, nos hemos quedado con este postre tan rico y que nunca habíamos probado y es que la panna cotta de fresas está riquísima, además, sabe mucho a fresas, algo que nos ha encantado, ya que el sabor de las fresas no queda enmascarado, sino que se potencia. Lo dicho, riquísimo, por supuesto repetiremos en más ocasiones.
Y ahora sí, vamos a preparar nuestra panna cotta, siguiendo las instrucciones de Dani.
INGREDIENTES:
- 200 de nata líquida para repostería
- 250 gr. de fresas (pesadas después de lavarlas y quitarles el pedúnculo)
- 90 gr. de azúcar
- 4 hojas de gelatina
ELABORACIÓN:
Preparamos los ingredientes. Pesamos las fresas ya limpias y el azúcar.
Trituramos las fresas con la turmix y pasamos con un colador para eliminar las semillas.
En una cacerola mediana y a fuego medio, añadimos la nata y removemos hasta que hierva, momento en que agregamos las fresas trituradas.
Después de añadir las fresas, hidratamos las hojas de gelatina de una en una en agua fría (entre 0º y 24º). En un par minutos está lista para escurrirla y añadirla a la olla.
Llevamos de nuevo a ebullición y retiramos, sin dejar de remover.
Preparamos unos tarritos o los moldes que vamos a utilizar para echar panna cotta.
Dejamos enfriar en la nevera no menos de cuatro horas.
Lo único que falta es disfrutar de este postre exquisito.
Espero que disfrutéis tanto como nosotros de esta panna cotta.
