domingo, 27 de noviembre de 2016

Alubias pintas estofadas con chorizo (y algo más) Reto #Asaltablogs


Este mes, en el reto #Asaltablogs, ha salido elegido un blog con infinidad de recetas, me he vuelto loca, porque vi muchas que me gustaban, tanto saladas como dulces, así que  busqué ayuda en casa para tomar una decisión final. Así que nos decidimos por esta receta por dos razones principalmente, una porque hace poco que hice mi gran descubrimiento culinario ¡me gustan las judías! cosa que antes no sabía, porque de pequeña las detestaba, supongo que como muchos niños. Me alegra saber que han cambiado mis gustos, así no me pierdo saborear estas recetas tan ricas, además en casa estos platos siempre son bienvenidos. Y dos, ya que está haciendo frío, lo que más nos apetece es comer comidas calentitas de cuchara.
El blog asaltado es Cuadernos de cocinay la receta elegida es "Alubias pintas estofadas con chorizo" (podéis ver el blog asaltado y la receta pinchando sobre las palabras subrayadas, no dejéis de visitarlo, porque merece la pena).

Pues vamos a ver cómo se preparan estas judías, que están deliciosas.



INGREDIENTES:
- 250 gr. de alubias pintas *
- 2 cebolletas medianas**
- 1/2 pimiento verde****
- 1/2 pimiento rojo
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón
- Chorizo****

Para hacer mi versión he cambiado algunas cosas:
* He utilizado para mi receta 350 gr.
** He puesto una cebolleta grande
*** He cambiado los dos medios pimientos por un pimiento verde grande
**** Además de los dos chorizos, he añadido lacón, panceta fresca y una morcilla.



 ELABORACIÓN:
Ponemos las judías pintas en remojo la noche anterior. Las metí en la nevera hasta el día siguiente.
Amalia las prepara en olla express, pero yo nunca la utilizo, así que las preparo en una olla normal.
Pues bien, lavamos y escurrimos las judías que tenemos en remojo y las echamos en una olla. Las cubrimos con agua fría, más un par de dedos más de agua. Ponemos al fuego a una temperatura media-alta. 
Añadimos los chorizos, al los que habremos hecho unos pequeños cortes por toda la superficie para que no exploten en la olla y el lacón y la panceta en trocitos. La morcilla la añadiremos al final.
Mientras se calientan las judías, picamos los ajos, la cebolleta y el pimiento. En una sartén con un chorrito de aceite de oliva, doramos los ajos, entonces, echamos la cebolleta con un poquito de sal y pochamos. Cuando esté transparente añadimos el pimiento verde picado finamente, añadiendo otra pizca de sal.
Cuando el pimiento esté cocinado, bajamos un poquito el fuego y añadimos una cucharadita de pimentón picante, y removemos bien , lo justo para que se integre con el resto de ingredientes. Retiramos del fuego y reservamos. 






Iremos quitando la espuma que vaya saliendo durante la cocción, y el exceso de grasa que suelten los chorizos.
Cuando las judías lleguen a ebullición, añadimos un chorro de agua fría. Repetiremos dos veces más cada vez que hiervan las judías. Es lo que se llama "asustarlas", con estos cambios de temperatura nos aseguramos que las judías queden tiernas. 





Bajamos el fuego a medio-bajo, y a esta temperatura terminaremos de hacer las judías. Unas tres horas serán suficientes.
Después de echar el tercer chorrito de agua fría y las alubias estén hirviendo de nuevo, cogemos un vaso de caldo de la olla, las verduras que teníamos reservadas y trituramos (en casa no querían las verduras enteras) y añadimos a las judías.


Tras dos horas aproximadamente al fuego, tenemos casi listas las alubias. Añadimos la morcilla.
Y ahora sólo queda esperar, probándolas de vez en cuando, a que estén tiernas. No las removemos, sino que daremos pequeñas sacudidas a la olla para moverlas, pues de lo contrario, se romperán las judías. 
Apagamos el fuego y ya están listas para servir. Al día siguientes estarán aún mejor. 



Espero que os haya gustado.

lunes, 21 de noviembre de 2016

Albóndigas en salsa. Receta de mi madre



Os traigo otra receta de mi madre que he visto siempre en mi casa, desde que era pequeña, o desde que me acuerdo. Son esos platos de toda la vida, de nuestras madres, que no debemos perder, y por eso estoy recopilándolos para que no se me olvide cómo prepararlos. Además, al estar lejos de casa, siempre que preparo una receta que suele hacer mi madre, huele toda la casa a ella y a mi familia y eso me encanta.


Voy a enseñaros estas albóndigas tan ricas.

INGREDIENTES:
- 400 gr. de carne picada de ternera
- 400 gr. de carne picada de cerdo
- 2 huevos
- Perejil fresco, picado
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de pan rallado
- Sal 
- Pimienta
- 1 cebolla grande
- 4 ó 5 tomates
- Aceite de oliva
- Un chorrito de vino blanco 
- Medio vaso de agua
- 2 ó 3 hojas de laurel
- 2 clavos
- Pimienta en grano


ELABORACIÓN:

En un bol, echamos la carne picada, los ajos y el perejil muy picaditos, los huevos, el pan rallado, la sal y la pimienta. Removemos todo para que se reparta bien, cubrimos con papel film y dejamos unas horas en la nevera.



Transcurrido el tiempo de reposo, hacemos las bolitas y freímos en aceite de oliva, dando vueltas para que se haga por todos lados por igual.



Vamos sacando las albóndigas sobre papel film. Reservamos.
Cortamos la cebolla, en una sartén a fuego medio, con un chorrito de aceite, pochamos la cebolla, previamente salpimentada. 
Mientras, troceamos los tomates y los añadimos a la sartén cuando la cebolla se haya pochado. Añadimos una pizca de sal.



Tras unos minutos, añadimos el chorrito de vino blanco. Seguimos cocinando y removiendo de vez en cuando. Cuando se haya consumido el caldo que sueltan los tomates, retiramos la sartén. 

En una cazuela, a fuego medio-bajo, echamos el laurel, los clavos, unos granos de pimienta y las albóndigas. Agregamos la mezcla de tomate y medio vaso de agua. Y dejamos al fuego removiendo con cuidado para no romper las albóndigas, hasta que la salsa espese.



Tenemos que tener cuidado en este punto, cuando la salsa esté espesando, que es cuando se pueden pegar las albóndigas al fondo, así que, en ese momento, retiramos la cazuela del fuego y ya tendremos listas nuestras albóndigas. 



Espero que os gusten, a mí me encantan.

lunes, 14 de noviembre de 2016

Tiramisú (en tarros de cristal)


Hace muchos años que preparamos este tiramisú en mi casa, la receta nos la dio mi tío. Está delicioso, no he visto a nadie que haya dicho que no le guste. 
Esta vez he decidido ponerlo en tarritos individuales, así no corremos el peligro de comernos todo el tiramisú, porque está tan rico que no se puede parar.
Veréis que os digo la verdad cuando lo probéis. ¿Vamos a prepararlo?

INGREDIENTES:

*NOTA: En esta ocasión he utilizado la mitad de los ingredientes aproximadamente, pues éramos sólo 3 personas en casa, esta receta es para unos 8 personas. He usado: 3 huevos, 3 cucharadas de azúcar, 250 gr. de mascarpone, media tableta de chocolate y 1 paquete de bizcochos.

- 5 huevos
- 500 gr. de queso mascarpone
- 1 tableta de chocolate para repostería
- 5 cucharadas soperas de azúcar
- Vino dulce, un chorrito de brandy (también podemos utilizar Amaretto)
- Café cargado
- 2 paquetes de bizcochos de soletilla
- Cacao puro en polvo


ELABORACIÓN:

Con las yemas y el azúcar (dos cucharadas por ser la mitad de la cantidad) en un bol, batimos hasta que doble su volumen y esté esponjoso, entonces añadimos el queso mascarpone. 



Si lo batimos en una amasadora tendremos suficiente, pero si lo hacemos a mano, habrá que deshacer los grumos del queso mascarpone con las manos.


 


Batimos las claras a punto de nieve junto con una cucharada de azúcar.
 


Las añadimos a la mezcla anterior con la ayuda de una lengua, con movimientos envolventes para que no se bajen las claras, hasta que estén bien integradas.



Añadimos el chocolate, previamente rallado. Seguimos con movimientos envolventes, hasta conseguir una mezcla homogénea.






Preparamos un café cargadito, lo vertemos en un plato grande o en un taper, como he hecho en este caso, y añadimos un buen chorro de vino dulce y un poquito de brandy. Si está demasiado fuerte de sabor, podéis rebajarlo con un poquito de agua.

Ahora montaremos el tiramisú. Esta vez he preferido presentarlo en porciones individuales poniéndolos en tarritos, aunque normalmente lo preparo en una fuente, siguiendo el mismo procedimiento: empezamos con una capa de bizcocho en la base y después con la crema de mascarpone, repetimos hasta terminar con una de crema. 


Mojamos los bizcochos en la mezcla de café, tan solo un instante, para que no se rompan, es suficiente para que se empapen bien.


Finalmente, en el momento de comer nuestro tiramisú, espolvoreamos con un poquito de cacao puro en polvo.


Es un postre delicioso y muy fácil de preparar. 
¡Que aproveche!

lunes, 7 de noviembre de 2016

Pasta con salsa de calabaza y ternera picada


Esta semana compré calabaza, porque esta temporada aún no había preparado nada con este ingrediente, y la verdad que me apetecía. Pero no quería hacer la típica crema de calabaza, aunque está muy rica, o unos cupcakes como estos que preparé, que también estaban deliciosos, u otra receta que ya hubiera probado. Así que busqué por internet una receta para hacer con pasta. Encontré varias, pero la que más me llamó la atención fue la salsa de calabaza para pasta del blog "Directo al paladar", aunque como siempre, esta vez también preparé mi versión. Me ha gustado mucho el resultado, por el sabor suave de la calabaza pero a la vez muy reconocible. Riquísima. Así que aquí os la dejo, a ver qué os parece.



INGREDIENTES:

- Pasta ( he utilizado nidos)
- 600 gr. de calabaza
- 1 cebolla grande
- Perejil fresco
- Una pizca de nuez moscada
- 300 gr. de carne de ternera picada
- 200 ml. de nata para cocinar
- Queso emmental
- Avellanas
- Pimienta (molinillo 5 pimientas)
- Sal rosa
- Aceite de oliva
- Un chorrito de vino blanco


ELABORACIÓN:
Picamos la cebolla y pochamos en una cacerola, con un chorrito de aceite de oliva. Añadimos sal y perejil fresco picado.



Mientras se hace la cebolla, troceamos la calabaza en cubitos. Añadimos a la olla cuando la cebolla esté transparente, junto con un poquito de sal. Agregamos una pizca de nuez moscada.


Tapamos la olla y dejamos cocinar hasta que la calabaza esté blanda y se deshaga. Vamos removiendo de vez en cuando. Añadimos un chorrito de vino blanco y dejamos que se evapore un poco.

En una sartén con un chorrito de aceite de oliva, echamos la carne, previamente salpimentada y doramos. Reservamos.


Vertemos la nata en la cacerola y bajamos el fuego. Vamos removiendo hasta que estén todos los ingredientes bien integrados.



Entonces agregamos la carne que tenemos reservada y removemos un poco. 

Tiene un aspecto un tanto peculiar, pero no os dejéis llevar por la apariencia... Tiene un sabor delicioso. 
Rectificamos de sal.

Rallamos el queso y picamos unas avellanas.

Cocemos la pasta según las instrucciones del fabricante y emplatamos, poniendo la pasta, salsa al gusto, el queso rallado y terminamos con las avellanas y una pizca de pimienta picada.



Espero que os guste, a nosotros nos ha encantado. Hasta la próxima.