Croquetas de carne y morcilla de Albacete

      
     Lo de las croquetas y yo, es algo personal... No entiendo cómo a mi madre le sale una masa tan compacta... claro que ella es una artista... Mmmm... sus croquetas de puchero... Se me hace la boca agua...

     A mí la masa casi se me "esparce" y no sé por qué... Así que esta vez he pensado hacerla más compacta, con más relleno... Pero algo se me escapa... No sé qué hago mal... Lo bueno es que cuando las paso por huevo y luego por pan rallado ya sí que se me quedan duritas y con la forma que quiero... A lo mejor tiene que ser así...

     He utilizado la morcilla que me trajo una amiga para hacerlas, el salchichón y las güeñas que también me trajo... mmm... ni rastro ya... jijiji... qué bueno estaba todo... y con la otra morcilla me hice un revuelto con varias cosas que encontré por la cocina y qué mejor manera de comer la que me quedaba que haciendo unas croquetitas...

INGREDIENTES:

- 1 cebolla

- 200 gr de carne picada de pavo

- 1 morcilla pequeña

- 1 cucharadita de nuez moscada

- Pimienta (molinillo 5 pimientas)

- Sal

- Aceite de oliva

- 2 huevos

- Pan rallado

- 1/2 l. de leche

- 3 cucharadas soperas de harina

- 50 gr de mantequilla

ELABORACIÓN:

     En una sartén a fuego medio-alto, vamos pochando la cebolla cortada finamente y añadimos sal. Entonces añadimos la carne picada, echamos la nuez moscada y la pimienta, y doramos. Terminamos integrando la morcilla picadita sobre la sartén, cociendo durante unos minutos. Rectificamos de sal si es necesario. Reservamos.

     En una cazuela ponemos a fuego medio-bajo 50 gr de mantequilla y tres cucharadas soperas de harina, y vamos removiendo hasta que la harina esté un poquito dorada. Entonces vamos añadiendo la leche. Primero he hechado una taza y he estado removiendo hasta que no tenía grumos. He separado la cazuela del fuego y he batido, la he vuelto a poner al fuego y he seguido moviendo. Hacemos lo mismo con una segunda taza de leche, removemos al fuego y removemos fuera de él hasta que todo esté perfectamente integrado. Repetimos el proceso con la otra media taza de leche que nos queda.

Cuando esté lista la bechamel, añadimos la carne y removemos. 

Dejamos enfriar para luego meterla en la nevera en un tupper durante al menos 12 horas.

Ahora que tenemos la masa fría, vamos a hacer las croquetas. Me he ayudado de una manga pastelera para que me salieran más o menos todas iguales.

He pasado cada porción de masa por huevo batido y después por pan rallado, les he dado la forma que quería (¡me han quedado casi cuadradas!) y ya las tenemos listas para freir en aceite muy caliente. Yo las congelé y hoy las he probado... mmm... qué saborcillo le da la morcilla... 
- NOTA: Me he dado cuenta que he borrado las fotos del proceso de preparación de las croquetas... ¡¡horror!! Nada más tengo las que he hecho cuando las he frito... uff... ¡qué mal!