Lo bueno de hacer recetas es cuando sobra algo... A veces: "... esto para tirar que no sé qué hacer con ello..."
¡Pues no! No tiro ni un hilo.
Así que, como la semana pasada volví a hacer galletas para ponerle las letras a la tarta doble de chocolate, decidí hacer algo con ellas, algo que no fuera comérmelas así, "tal cual".
¿Y cómo quedarían estas galletas si las convirtiera en cupcakes?
Pues me puse a ello y lo más asombroso es que la masa una vez horneada tenía un sabor casi igual que las galletas, pero con una textura totalmente diferente... el crujiente de las galletas se convirtió en un tierno bizcocho con un sabor delicioso. Si a esto le añadimos el frosting, conseguimos una mezcla perfecta, una crema de mantequilla merengada con un punto de canela... Para chuparse los dedos y hasta el papelito de las magdalenas...
Tengo que decir que la receta del frosting la he cogido del libro de María Gómez Martín "Deliciosos Pasteles- El mundo de los cupcakes", que me regaló mi madre en Navidad y está riquísimo...
Tengo que decir que la receta del frosting la he cogido del libro de María Gómez Martín "Deliciosos Pasteles- El mundo de los cupcakes", que me regaló mi madre en Navidad y está riquísimo...
INGREDIENTES:
Para las magdalenas:
- 3/4 de taza de harina de repostería
- 1/2 taza de azúcar
- 100 gr de mantequilla
- 2 huevos
- 1 cucharadita de levadura (Royal)
- Galletas belgas speculoos
Para el frosting de crema merengada:
- 4 claras de huevo
- 250 gr de azúcar glass
- Una pizca de sal
- 300 gr de mantequilla
- Una cucharadita de extracto de vainilla
- Una cucharadita de canela (este último ingrediente lo he añadido yo)
ELABORACIÓN:
Lo primero que hice fue el frosting, así mientras hacía las magdalenas, lo metí a la nevera para que cogiera mejor textura para adornar los cupcakes, aunque a temperatura ambiente ya queda bien.
Poner una cazuela con agua a hervir. Mientras en un bol, echar el azúcar glass, la sal y las claras de huevo. Cuando el agua esté en ebullición, acercar el bol, pero sin tocar el agua, así estaremos utilizando el baño de vapor.
Removemos nuestra mezcla hasta que se haya deshecho el azúcar glass.
Cuando estén los ingredientes integrados retiramos el bol del vapor y seguimos removiendo hasta que la mezcla se enfríe y hasta que haya adquirido volumen.
Entonces añadimos la mantequilla en pomada, que he removido antes con un tenedor y la vainilla y seguimos removiendo hasta que la mezcla esté esponjosa.
He pasado la crema a un tupper y lo he tapado con papel film y lo he metido a la nevera y me he puesto a hacer la masa de los cupcakes.
He cogido la receta que utilicé en los cupcakes de oreo y los he cambiado por las galletas belgas, nos salen unos 16 cupcakes con estas medidas.
Precalentamos el horno a 180º calor arriba, calor abajo.
En un bol, batimos la mantequilla con el azúcar. Después añadimos los huevos, uno a uno, hasta obtener una mezcla esponjosa.
En un bol a parte, echamos las galletas cubiertas de leche, y las dejamos que se ablanden. Reservamos.
Agregamos entonces la harina con la levadura al primer bol y removemos.
Entonces cogemos el bol con las galletas que ya estarán deshechas, y si no, nos ayudamos con un tenedor, y la integramos con los demás ingredientes y removemos un poquito más, hasta que la masa sea homogénea.
Metemos al horno a 180º calor arriba, calor abajo durante 16-18 minutos en la bandeja del centro.
Como topping he usado unas letras de galletas que tenía guardadas y que me sobraron de la tarta doble de chocolate también.
- 4 claras de huevo
- 250 gr de azúcar glass
- Una pizca de sal
- 300 gr de mantequilla
- Una cucharadita de extracto de vainilla
- Una cucharadita de canela (este último ingrediente lo he añadido yo)
ELABORACIÓN:
Lo primero que hice fue el frosting, así mientras hacía las magdalenas, lo metí a la nevera para que cogiera mejor textura para adornar los cupcakes, aunque a temperatura ambiente ya queda bien.
Poner una cazuela con agua a hervir. Mientras en un bol, echar el azúcar glass, la sal y las claras de huevo. Cuando el agua esté en ebullición, acercar el bol, pero sin tocar el agua, así estaremos utilizando el baño de vapor.
Removemos nuestra mezcla hasta que se haya deshecho el azúcar glass.
Cuando estén los ingredientes integrados retiramos el bol del vapor y seguimos removiendo hasta que la mezcla se enfríe y hasta que haya adquirido volumen.
Entonces añadimos la mantequilla en pomada, que he removido antes con un tenedor y la vainilla y seguimos removiendo hasta que la mezcla esté esponjosa.
La mantequilla |
He pasado la crema a un tupper y lo he tapado con papel film y lo he metido a la nevera y me he puesto a hacer la masa de los cupcakes.
He cogido la receta que utilicé en los cupcakes de oreo y los he cambiado por las galletas belgas, nos salen unos 16 cupcakes con estas medidas.
Precalentamos el horno a 180º calor arriba, calor abajo.
En un bol, batimos la mantequilla con el azúcar. Después añadimos los huevos, uno a uno, hasta obtener una mezcla esponjosa.
En un bol a parte, echamos las galletas cubiertas de leche, y las dejamos que se ablanden. Reservamos.
Agregamos entonces la harina con la levadura al primer bol y removemos.
Entonces cogemos el bol con las galletas que ya estarán deshechas, y si no, nos ayudamos con un tenedor, y la integramos con los demás ingredientes y removemos un poquito más, hasta que la masa sea homogénea.
Metemos al horno a 180º calor arriba, calor abajo durante 16-18 minutos en la bandeja del centro.
Como topping he usado unas letras de galletas que tenía guardadas y que me sobraron de la tarta doble de chocolate también.
Estupendos Cris!! estoy contigo, hay que aprovecharlo todo y si es de forma original mejor. Ese frosting tiene que estar delicioso!!besos
ResponderEliminarHola Rocío, sí que estaba bueno el frosting, merece la pena hacerlo!! Prúebalo y verás qué rico!
EliminarUn besito
ya estoyyyy aquuuuíiiiii, jjisjsijs, y ésta me la apuntoooooooo, no lo dudes! , tienen que estar genial..cuando la pruebe te lo cuento. un besote!
ResponderEliminar¡Vale! ya me contarás, están riquiiiiiiiiísimoss... jijijiji... Un besitoo!
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