Aprovechando que he venido a Málaga a pasar las Navidades a casa de mis papis, pensé que podía hacer algo especial y ayer me levanté y fui directa a una tienda que me encanta y a la que no había vuelto a ir desde el verano, es "La casita dulce de las flores", hay de todo para la repostería... me puse las botas comprando cositas... y por fin me llevé el colorante rojo que quería para hacer los cupcakes red velvet, claro que ya compré otras cosas que también quería... a una tienda como esa hay que ir con una nota, donde habremos apuntado lo que queremos y no salirnos de ella!! pero creo que eso es imposible... al menos conmigo...
Cuando salí de la tienda iba feliz con mis bolsas de vuelta a mi casa porque por fin iba a poder hacer estos cupcakes que siempre me han llamado tanto la atención, tenía muchísima curiosidad. Estuve mirando por internet, varias recetas diferentes, pero al final me he quedado con la de Objetivo: cupcake perfecto. Así que esta mañana me he puesto manos a la obra... Y este ha sido el resultado... estoy muy contenta, porque tiene un sabor buenísimo y creo que muy buen aspecto!
INGREDIENTES:
- 55 gr de mantequilla sin sal
- 150 gr de azúcar (1 taza y 1/2)
- 1 huevo
- 1 cucharada grande de cacao en polvo (Valor)
- 1 cucharadita de azúcar vainillada
- 120 ml de buttermilk (VER NOTA AL FINAL)
- 150 gr de harina (un poquito menos de 1 taza)
- 1 cucharadita y media de bicarbonato
- 1 cucharadita de vinagre de vino blanco
- 1 cucharadita de colorante en pasta rojo intenso (Wilton)
Para la cream cheese icing:
- 125 gr de queso Philadelphia
- 60 gr de mantequilla
- 300 gr de azúcar glass
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 170º
- Magdalenas:
En un bol echamos el azúcar y la mantequilla y removemos.
Cuando la mezcla esté homogénea, añadimos el huevo y volvemos a remover.
Cuando la mezcla esté homogénea, añadimos el huevo y volvemos a remover.
Preparamos el buttermilk y mientras se hace, vamos tamizando la harina con el cacao.
Entonces, echamos en el bol la mitad de la harina y el cacao y vamos moviento hasta que esté todo bien mezclado.
Añadimos el buttermilk y removemos hasta que se integre todo.
Echamos el azúcar vainillado y el resto de la harina y el cacao, batimos todo de nuevo..
Es en este momento, en el que ya tenemos todos los ingredientes mezclados, en el que vamos a introducir el colorante rojo, así podremos ver cuál es el tono exacto que queremos darle a nuestros cupcakes, echando más o menos según el color que nos guste.
En una taza, mezclamos la cucharadita de vinagre con el bicarbonato, y cuando burbujee, lo añadiremos también al cuenco con todos los ingredientes anteriores. Terminamos la masa removiendo todo de nuevo.
- Cream cheese icing:
En un bol, echamos la mantequilla a temperatura ambiente y los 300 gr de azúcar glass tamizados. Empezamos a mover hasta conseguir una mezcla homogénea, cuando la tengamos, añadiremos el queso Philadelphia.
Tengo que decir que he hecho trampa, porque he removido los ingredientes a mano, y después de un rato aún no estaban totalmente integrados el azúcar glass con la mantequilla, así que he empezado a echarle el queso, hasta que se lo he puesto todo. Aún habiendo tamizado el azúcar, me han salido unos pequeños grumos, y como no se le quitaban, he terminado de hacer la crema con la batidora... ha quedado finita, sí... jeje...
He horneado en tandas de 6 cupcakes, los he dejado 18 minutos a 170º.
En la manga pastelera he metido el cream cheese icing y la he dejado en la nevera mientras se enfriaban los cupcakes. Con el descorazonador, le quitamos el centro a los cupcakes y lo rellenamos con la manga pastelera. Terminamos decorando poniendo la crema desde el centro hacia afuera, haciendo círculos.
Finalmente he puesto algunas miguitas encima de los cupcakes para terminar de decorarlos.
Finalmente he puesto algunas miguitas encima de los cupcakes para terminar de decorarlos.
NOTA: No he encontrado el buttermilk por
ningún lado (¡se me olvidó mirar en La casita dulce de las flores!) así que lo he hecho casero: he puesto 120 ml de leche templada y el zumo de medio limón y lo he dejado reposando 10 minutos, así lo obtenemos, tiene una textura parecida al yogur cuando ha pasado el tiempo de reposo.
Por favo que gueno está los velvet y la cremita blanca esa ta de muete!
ResponderEliminar¡Están preciosos! No me extraña que hicieras buenas compras en la casita Dulce de las Flores. Yo fui este verano y casi me vuelvo loca!!! Encantada de conocerte!
ResponderEliminarPues sí que me gusta el frosting como me decías en la entrada de la tarta guiness....¿Y me aguantará como cobertura de una tarta en pleno Julio en Málaga???...ufff...no sé yo...Pero sí que tiene que estar rica!!
ResponderEliminarPor cierto, el buttermilk lo tienes en Lidl y encima muy baratito...jeje.
Besos,
Susana